El relieve gallego está conformado por el macizo Galaico-Leonés. En el se distinguen varias zonas: las sierras orientales, la depresión o meseta central, y las sierras centrales y las depresiones litorales, donde son más frecuentes las rías, que dan lugar a una costa muy recortada.
CLIMA:
El clima es oceánico, con temperaturas suaves durante todo el año y precipitaciones abundantes. En el interior y en las zonas altas, las temperaturas presentan veranos cálidos y inviernos fríos.
VEGETACIÓN:
La vegetación característica es el bosque oceánico, aunque han ido repoblando pinos y eucaliptos y se han ido formando bosques.
RÍOS:
Los ríos son abundantes, cortos, caudalosos y regulares; el que más destaca es el río Miño y su afluente el Sil.
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